De un día para otro y con muchas ganas de ir a pescar mi
compañero Jose, su sobrino Jaime y yo decidimos realizar una mini sesión en nuestro lugar de costumbre.
Teníamos mucho mono de pesca ya que desde noviembre por motivos de trabajo
no habíamos tenido tiempo para practicar nuestra afición.
Viernes por la tarde preparamos nuestro material, como iba a
ser una sesión corta decidimos llevar solamente lo imprescindible, con todo
listo esperando a la mañana del sábado nos vamos a la cama y como no antes de
que sonara el despertador ya estábamos despierto se nota que teníamos ya muchas
ganas de realizar nuestra primera sesión del año
.
Son las 7 de la mañana y partimos rumbo a nuestro pantano
preferido por el camino las charlas y el mono de pesca hacen mucho más corto el
viaje. Pero no todo iban a ser alegrías a la llegada al pantano nos encontramos
que había muchísima gente fuimos visitando puesto por puesto haber si nos encontrábamos
un sitio libre para nosotros y nada en la orilla que tiene el acceso fácil todos
los puesto ocupados nos vino muy bien la ruta turística ya que estamos organizando
un pequeño concurso y así fuimos viendo en qué condiciones se encontraba el pantano,
los caminos y viendo el numero de puestos que podemos meter para el concurso.
Cambiamos de orilla y tras una pequeña caminata decidimos
ponernos en un lugar cercano para no tener que cargar mucho con todos los bártulos
ya que la sesión iba a ser muy corta.
Mucho aire, mucho frio, poca actividad de peces y muchísima gente
eran las condiciones que nos encontrábamos, una vez montado y puestas nuestras
posturas en el agua damos una vuelta haber
en que condiciones estaba esta otra orilla y ver el número de puestos que podíamos
meter ya que es un pantano pequeñito, una vez visualizado el terreno nos
sentamos a esperar y a comernos el bocata jeje mejor momento de la mañana hasta
ahora.
Una picada trasera en la caña de mi compañero Jose sin resultado y con pérdida de aparejos incluida y unas tímidas picadas en las cañas
del joven Jaime y en una de las mías era todo lo que nos deparaba la mañana hasta
el momento.
Hasta que a las 12.30 más o menos una de mis cañas empieza a
pitar una pequeña carrera para coger la caña y una pequeña lucha para llevar a
la sacadera una pequeña común de 3,5 kilos tras una cura y una foto la
devolvemos al agua sabiendo que estas pequeñas capturas en el futuro nos pueden
dar grandes sorpresas.
Sin nada más que contar ya que la mañana no dio para mucho
decidimos recoger y volver a casa un poco decepcionados pero al menos nos
quitamos el bolo.
A ver si en la próxima sesión tenemos un poco más de suerte y
podemos contaros mas cosas.
Un saludo y hasta la próxima, un saludo.